Después de estar prófufo durante siete años, ayer fue detenido José Luís Beteta Rosario(28), acusado de abusar sexualmente y embarazar a una niña de diez años de edad. El padre de la menor pidió a las autoridades judiciales imponer la pena máxima al detenido.
En noviembre del año 2005, el padre de la víctima se enteró que su niña, su princesa, estaba esperando un bebé, concebido en una violación sexual. Indignado, denunció el caso en Tingo María, provincia de Leoncio Prado. El acusado José Luis Beteta Rosario, en aquella época, trabajaba como su peón. El sujeto aprovechaba su ausencia para dar rienda suelta a sus bajos instintos.
El inculpado maliciosamente se hacía llamar Lucas o Willmer Beteta Rosario para evitar ser reconocido. Pero, el paciente seguimiento del padre de la menor, en coordinación con la Policía y la Fiscalía, permitió detener al presunto violador en el poblado de Ayapiteg, provincia de Yarowilca.
El caso estuvo apunto de archivarse porque las autoridades no lograban identificar plenamente al agresor. Aunque para el padre de la víctima, el sujeto era conocido porque es cuñado de su hermana.
"Espero que los jueces y fiscales presten real interés a este caso. Que le den cadena perpetua al agresor", pidió el acongojado padre.
